El incremento en la tasa de contagios y hospitalizaciones producto de la cuarta ola de contagios por la variante ómicron de COVID-19, aunado a las enfermedades y padecimientos habituales en la temporada invernal, anticipan un escenario complejo para el sistema de salud del país.
En el Seguro Social, las consultas por infecciones respiratorias se incrementan hasta en 30 por ciento en la temporada invernal. Las enfermedades más comunes en esta época son: rinofaringitis, laringitis y bronquiolitis, sobre todo en niños; además de neumonía, cuadros de bronquitis aguda, asma bronquial e influenza en adultos.
Se estima que durante los meses de enero y febrero habrá un aumento considerable en el número de atenciones en las mil 525 Unidades de Medicina Familiar (UMF), 242 hospitales, y 25 Unidades Médicas de Alta Especialidad (UMAE), además de 3 mil 49 Módulos de Atención Respiratoria en el Primer Nivel de atención que opera el IMSS a nivel nacional.
Sin embargo, existe incertidumbre respecto a cómo será el comportamiento de la pandemia en esta temporada invernal, debido a la tasa de contagio de la variante ómicron cuyo comportamiento podría desencadenar diversos problemas en el sistema de salud pública.
Uno de ellos es la exposición del personal médico a la enfermedad, tomando en cuenta que han sido 22 meses de combatir sin tregua al COVID-19. Otro factor que preocupa es la alta movilidad social, riesgo calculado ante el porcentaje de vacunación de la población mayor de 18 años de edad, que en el caso de Nuevo León supera el 80 por ciento.
El IMSS hizo un llamado a la población a reforzar las medidas preventivas como usar ropa abrigadora, evitar cambios bruscos de temperatura, consumir alimentos con alto contenido de Vitamina C y D, frutas, verduras, además de beber abundantes líquidos.
Pidió a las familias acudir a los centros de salud para aplicarse la vacuna contra la influenza estacional, que ha demostrado ser eficaz en 70 por ciento para la prevención, y 90 por ciento para evitar complicaciones en niños, adultos mayores y grupos vulnerables. También es muy importante lavar frecuentemente las manos con agua y jabón, mantener el estornudo de etiqueta, evitar saludar de beso, no permanecer demasiado tiempo en espacios cerrados y concurridos, y usar de manera correcta el cubrebocas (con información del IMSS).